Señalan favoritismo y posibles irregularidades en Seguridad Pública.

A cinco meses de haber asumido la Dirección de Seguridad Pública, Juan Pablo Ramírez Talavera enfrenta señalamientos por presunto favoritismo, ascensos irregulares y manejo poco transparente dentro de la corporación, en un periodo en el que se han registrado 147 hechos dolosos.

De acuerdo con testimonios de elementos de la corporación que solicitaron el anonimato por temor a represalias, recientemente se realizaron varios ascensos de forma discrecional, sin criterios claros ni procesos evaluativos. Los nombramientos habrían sido promovidos directamente por el director Ramírez Talavera, favoreciendo principalmente a personas cercanas.

Uno de los casos más señalados es el de Tirso Cansino Benítez, actual encargado de despacho de Seguridad Pública, quien habría sido beneficiado junto con su círculo cercano: cuatro elementos recibieron el grado de policía tercero y uno más fue ascendido a policía segundo. Además, se le atribuye el nombramiento de una colaboradora como supervisora del sistema 911, también con un ascenso incluido.

A lo anterior se suman versiones internas que vinculan al director con la portación de arma de fuego sin acreditación oficial durante su gestión, lo que ha encendido las alarmas dentro del cuerpo de seguridad.

Cabe resaltar que operativamente, Ramírez Talavera no contaba con experiencia previa en campo, ya que antes de ocupar la dirección fungía como encargado de la academia de formación policial, lo que ha generado dudas sobre su capacidad para liderar una estrategia efectiva de seguridad en un contexto de alta incidencia delictiva.

Hasta el momento, las autoridades municipales no han emitido una postura oficial sobre estos señalamientos.