Salamanca, Gto.-Una jornada violenta sacudió la ciudad de Salamanca la noche del lunes, dejando un saldo trágico de cuatro personas muertas, entre ellas dos trabajadores del gobierno municipal, y una mujer embarazada lesionada, en hechos distintos ocurridos con menos de media hora de diferencia.
El primer ataque fue reportado a las 21:20 horas, cuando vecinos del centro de la ciudad alertaron sobre detonaciones en la calle Miguel Hidalgo. Al llegar, autoridades localizaron más de 30 casquillos percutidos, de distintos calibres y dentro de una pensión con razón social CAS Transportes, el cuerpo sin vida de un hombre de aproximadamente 70 años.
En la misma zona, un vehículo rojo resultó con impactos de bala. Su conductor, identificado extraoficialmente como Marcos, vecino de Cortázar, fue alcanzado por las balas de forma colateral mientras transitaba por el sitio. Resultó ileso, pero su unidad presentó daños materiales.
Poco después, a las 21:40 horas, un segundo hecho violento se registró en la comunidad de Cárdenas, al norte del municipio.
En la calle Matamoros fueron localizados los cuerpos de tres hombres asesinados con armas largas. Dos de ellos estaban tendidos en la vía pública con lesiones en rostro y pecho; el tercero, en la entrada de una vivienda, presentaba heridas en la cabeza y brazos.
Las víctimas fueron identificadas como Arturo Núñez Rivera y Alfredo Núñez Rivera, empleados del Gobierno Municipal de Salamanca, así como su padre. Los tres perdieron la vida en el sitio. Junto a ellos se encontraba una mujer embarazada, quien sufrió una crisis nerviosa y fue atendida por paramédicos de la Cruz Roja. Afortunadamente, no requirió hospitalización.
En el lugar se contabilizaron 30 casquillos, aunque aún se desconoce el calibre específico.
Ambos eventos fueron atendidos por corporaciones de seguridad y los sitios quedaron resguardados mientras agentes de la Fiscalía General del Estado llevan a cabo las investigaciones correspondientes.
Este crimen, con víctimas directas del gobierno local, reaviva el clima de inseguridad que se vive en Salamanca y pone nuevamente en alerta a sus habitantes.


