Salamanca, Gto.- Daniel Estrada Ramírez de 25 años fue una de las víctimas mortales que dejo el ataque armado que se perpetró la tarde–noche del pasado domingo en la comunidad San José de Mendoza, en medio de su dolor como abuela, María Mercedes Martínez compartió parte de la historia de su nieto, que a pesar de haber perdido a su madre a temprana edad, logró vencer obstáculos hasta llegar a convertirse en un miembro funcional de su comunidad, con un grado de estudios que le permitió formar parte de una de las armadoras japonesas con mayor reconocimiento a nivel mundial.
“Él desde los nueve años quedó solito sin su mamá, falleció y se quedó conmigo, para mí era un niño muy especial, estudio y se graduó de ingeniero, en cuanto termino sus estudios empezó a trabajar, él de su trabajo a su casa, el día domingo era cuando salía con sus amigos, era muy bueno (…) trabajaba en la parte de reclutamiento en la empresa de la Toyota, a veces por su trabajo se lo llevaban a otras partes para hacer reclutamientos”, compartió.
Para Daniel y su familia, el pasado domingo transcurrió de manera habitual, él salió a cortarse el pelo por la mañana, para luego acudir con sus consanguíneos a una fiesta en la misma comunidad, sin embargo, al regresar a casa se entretuvo con un grupo de amigos, víctimas también del artero ataque que acabó con la vida del joven de 25 años.
“Estábamos en una fiesta, de regreso le hablaron unos amigos que estaban ahí en la tienda y regresó, todos los que han fallecido los conocí, fueron niños de bien, no les gustaba andar en pleitos, por eso el dolor de que nos los arrebatan sin que debieran nada (…) las personas que conocieron a mi nieto, dicen que era buena persona, ayudaba a su comunidad, sin meterse en ningún tipo de problema, siempre saludaba a los vecinos”, recordó.
Tras el ataque, Daniel aún herido alcanzó a llegar herido a casa, pero ante la gravedad de sus lesiones falleció al pie de una imagen de la virgen de Guadalupe que se encuentra en el acceso del que fuera en vida su domicilio.